Buscador
Ver el sitio sin publicidad Suscríbete a la revista
Artículos

Sujo: Astrid Rondero y Fernanda Valadez llevan su colaboración al siguiente nivel

23-09-2024, 8:56:45 PM Por:
Sujo: Astrid Rondero y Fernanda Valadez llevan su colaboración al siguiente nivel

En entrevista con Astrid Rondero, la cineasta mexicana nos cuenta cómo fue compartir por primera vez la silla de dirección con su colega y cómplice Fernanda Valadez.

Por casi quince años, Astrid Rondero y Fernanda Valadez han sido inseparables colegas y cómplices. Además de la aclamada película Sin señas particulares (2020), estas cineastas mexicanas han levantado en conjunto otros títulos fílmicos dignos de reconocimiento –entre largometrajes y cortometrajes– que las hacen hoy en día no sólo una dupla colaborativa verdaderamente fértil, sino también dos embajadoras del cine mexicano contemporáneo.

Sujo (2024), la más reciente cinta surgida de esta asociación, no llega todavía a salas del país. No obstante, ya fue seleccionada por la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas para representar a México en los premios Goya y Óscar de 2025. Aparte, durante varios meses ha viajado alrededor del mundo, cosechando aplausos, ovaciones y más de un galardón. No es la primera vez que Rondero y Valadez gozan de tan caluroso recibimiento. Por otro lado, nunca antes habían llovido laureles sobre una producción que (oficialmente) las acredite a ambas como directoras.

astrid rondero fernanda valadez
Sujo (2024)

Hacia una denominación correcta

Años atrás, Astrid Rondero declaró que hacer películas en alianza con Fernanda Valadez era como sostener una conversación. Ultimadamente, son las palabras de ambas las que permiten a determinado proyecto avanzar en la dirección correcta. No obstante, aunque su forma de trabajar siempre ha sido codo a codo, antes optaban por alternar roles. O sea, distinguir entre quién dirige y quién colabora únicamente en calidad de guionista o productora.

La silla de dirección le correspondía a quien iniciara la conversación, o dicho de otro modo, a quien viniera con la idea para una nueva película. Y fue por separado que estas realizadoras plantaron la semilla de sus respectivas óperas primas. De ahí que, aunque en conjunto las hicieron germinar, sólo Rondero figura como directora de Los días más oscuros de nosotras (2017) y sólo Valadez ostenta ese crédito, pero de Sin señas particulares.

Todo cambió con Sujo, proyecto que hasta 2020 prometía ser el segundo largometraje dirigido por Rondero en solitario (a fin de cuentas, ella había iniciado esa conversación). Sin embargo, por aquella época, la gente encargada de la distribución de Sin señas particulares en EE.UU. les hizo ver una verdad innegable y que ya no tenía ningún sentido disfrazar.

“Ellos sentían que [Sin señas particulares] era más bien una película en conjunto”, cuenta Rondero en entrevista con Cine PREMIERE. «Por eso en EE.UU. la promocionamos como una película de Fernanda Valadez y Astrid Rondero, y eso fue lo que nos hizo reflexionar sobre que efectivamente la manera en la que trabajamos no es muy común y se reconoce mucho mejor como una codirección”.

«Fue así que cuando yo traje el primer guion de Sujo, decidimos que ésta sería la película a partir de la cual llamaríamos nuestra colaboración de la forma correcta».

También te podría interesar: En la película Sujo, el hijo de un sicario escapa de la violencia y llega a la UNAM

Sujo es un coming of age donde el homónimo protagonista es un chico de Tierra Caliente que queda huérfano después de que su padre —un narcotraficante de poca monta— muere asesinado. Se trata de una ficción donde el joven Sujo (Juan Jesús Varela) sueña con viajar a la CDMX y estudiar en la UNAM. Sin embargo, la sombra del crimen organizado se cierne sobre él en cada etapa de su vida, ya sea para intimidarlo o para atraerlo dentro de sus filas.

De acuerdo a Rondero, Sujo es “una película espejo” de Sin señas particulares: el desgarrador relato de una madre que busca a su hijo desaparecido, sólo para descubrir que su destino fue incluso peor que la muerte. En el fondo, ambas cintas hablan de reclutamiento forzado, aunque lo hagan desde un punto de vista diferente.

«Sin señas particulares habla de cómo un hombre joven o un chico puede cometer terribles actos de violencia. Con Sujo, estamos preguntándonos cómo podemos evitar que un joven entre a la violencia o al crimen organizado. Entonces, es un espejo, tal cual».

astrid rondero fernanda valadez
Sujo (2024)

Sujo emergió no únicamente de la mano de sus dos directoras, sino de un talentoso equipo de producción que, desde la perspectiva de Rondero, “ha ido creciendo y madurando”. Por primera vez, ella y Valadez pudieron ceder gran parte de las labores de producción a alguien más –en este caso, a la productora Diana Arcega– y enfocarse en su novel misión de dirigir conjuntamente.

Sobre los desafíos relacionados a compartir la batuta con Valadez –una dinámica que eventualmente ambas retomarían para la serie documental El portal: La historia oculta de Zona Divas–, Rondero pone énfasis en las negociaciones. Alcanzar acuerdos creativos no siempre es fácil, sobre todo si existe una considerable divergencia en la manera de dirigir de ambas partes. Rondero, por ejemplo, acostumbra a trabajar con storyboards, mientras que Valadez a veces prescinde de ellos. Pero curiosamente fue a través del guion gráfico que pudieron pactar más fácilmente qué planos de Sujo filmar, en complicidad con la cinefotógrafa Ximena Amann.

«[Gracias a Sujo] aprendimos a confiar todavía más en este trabajo que tenemos en conjunto. No fue tan diferente a lo que hemos hecho antes. Pero lo positivo en esta ocasión fue que, durante el rodaje, las dos pudimos concentrarnos casi, casi al 100% en dirigir, que es algo que no habíamos podido hacer anteriormente».

Sobre festivales, fideicomisos y los inicios de una colaboración

Astrid Rondero y Fernanda Valadez cruzaron caminos por primera vez hace más de una década, gracias a la mediación del también realizador Ulises Pérez Mancilla. Sucedió durante la filmación de En aguas quietas (2011), proyecto estudiantil que Rondero dirigió y presentó como tesis en el entonces Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC).

Valadez, quien por su parte apenas estaba iniciando sus estudios en el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC), se sumó al crew de aquel cortometraje después de que Mancilla la recomendara para las labores de continuista. “[Ulises] no pudo ir a hacer de continuista para mi tesis, pero me dijo: ‘No te preocupes, amiga. Te voy a mandar a alguien que lo va a hacer muy bien’. Y ese alguien que lo hizo muy bien fue Fernanda Valadez. Y muy pronto hicimos mucha conexión”, platica Rondero.

«Siempre en una buena asociación, como que uno tiene los trozos que al otro le faltan. Y ella [Fernanda] tenía todos los pedazos correctos que me permitieron a mí creérmela».

De su colega del CCC, con quien eventualmente fundó la casa productora En Aguas Cine, Rondero aprendió a no esperar a que alguien ya posicionado dentro de la industria te abra las puertas. «En el CUEC teníamos la idea de que había que picar piedra desde abajo hasta que alguien te diera la oportunidad de ser director o directora, y siendo mujer, esa técnica no era la mejor técnica», nos comparte la cineasta.

«En cambio, [Fernanda] venía con esta visión de decir: ‘No, tú genera tu propia producción, tú pelea por tus proyectos y los fondos públicos están ahí para que todos los reclamemos’. Por eso Fernanda y yo somos además tan defensoras de los fondos públicos».

Fernanda Valadez (izquierda) y Astrid Rondero (derecha)

Desde 2020, esta dupla de realizadoras se ha manifestado enérgicamente en contra de la extinción de FOPROCINE y FIDECINE. En palabras de Rondero, el que los fondos públicos «ya no sean tan seguros y estén súper adelgazados, a quienes en realidad afecta es a los cineastas de las siguientes generaciones».

«A nosotras ya no nos toca lo peor, porque finalmente tuvimos esa primera oportunidad [que suponen los fideicomisos]. Esa primera oportunidad te capitaliza, por supuesto que no económicamente, pero sí en redes de apoyo. Entonces el haber hecho películas en el marco del FOPROCINE nos permitió conocer cómo funciona hacer una película, qué pasa después de hacer una película […] Aprendimos lo importante que es tener agente de ventas […] Todo eso es un capital que no nos pueden quitar».

Para la ganadora del premio Ariel, las carencias en política pública asimismo han propiciado que lamentablemente haya cada vez menos óperas primas de cineastas mexicanos participando en festivales.

«La conexión entre los festivales y la distribución es total. Si tú no estás en los festivales, es muy difícil encontrar distribución. Por eso creo que es muy importante seguir defendiendo los fondos públicos, particularmente por la gente más joven».

También te podría interesar: Con señas particulares: Retratos de quienes hicieron posible la mejor película mexicana de 2020

En cuanto a Sujo, ya hay una amplia distribución garantizada a nivel global. Apenas en agosto, debutó en salas francesas —bajo el título Hijo de sicario— y para antes de 2025, ya habrá estrenado en muchos otros países, incluidos EE.UU., España, Canadá, Nueva Zelanda, Australia, Grecia y, por supuesto, México. En nuestro territorio, su corrida comercial sucederá de la mano de Cinépolis Distribución, aunque no sin antes proyectarse dentro de la Selección Oficial de la 22° edición del Festival Internacional de Cine de Morelia, a celebrarse en octubre del año en curso.

En enero de 2024, este largometraje codirigido por Astrid Rondero y Fernanda Valadez obtuvo el Gran Premio del Jurado en la Competencia Mundial de Cine Dramático del Festival de Sundance, evento donde además se celebró su premiere mundial.

Más recientemente, Sujo arribó al igualmente prestigioso Festival de San Sebastián, como parte de la sección Horizontes Latinos. Ésta es la tercera ocasión en que Rondero y Valadez viajan a dicho encuentro cinematográfico con sede en España. En 2019, el proyecto en desarrollo de Sin señas particulares fue acreedor del premio WIP LATAM, y al año siguiente, la película terminada triunfó en aquella misma sección de San Sebastián donde ahora participa Sujo. “Es como regresar al lugar que nos dio la primera gran oportunidad de nuestras carreras”, asevera Rondero.

“Regresar a Donostia se siente como si estuviéramos en el camino correcto, con esta película que, además, nos tiene a Fer y a mí muy emocionadas. [La sección Horizontes Latinos] es uno de los escaparates de cine latinoamericano más importantes en Europa. Entonces nos sentimos también muy halagadas de que hayan considerado Sujo para esta selección”.

Sujo (2024)

Tiempo atrás, Astrid Rondero comentó que las y los directores mexicanos usualmente son tratados en los festivales internacionales como las y los mejores gimnastas de los Juegos Olímpicos. “Es muy inspirador que en otros países nos consideren del modo en que nos consideran”, comenta. «El cine mexicano es de una tradición tan larga, tan profunda, tan rica, que no podríamos hacer menos los cineastas mexicanos que hacer las películas lo mejor que podemos».

 Sujo tendrá su fecha de estreno comercial en cines el próximo 5 de diciembre.

autor Tengo muy mala memoria. Por solidaridad con mis recuerdos, opto por perderme también. De preferencia, en una sala de cine.
Comentarios