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Cine

Vuelven – Crítica

02-11-2017, 11:15:58 AM Por:
Vuelven – Crítica

Una de las mayores fortalezas del filme es la pericia actoral y el realismo con que los niños protagonistas interpretan la orfandad y el desamparo.

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La directora mexicana Issa López nos dijo en entrevista que nunca había recibido tan buenas críticas con una película hasta Vuelven (ella también es la realizadora de Efectos secundarios y Casi divas), y no es para menos. Su nuevo proyecto es una historia cruda, socialmente realista y vigente pero con vericuetos fantásticos y terroríficos que inmediatamente remiten al cine de Guillermo del Toro, particularmente a El espinazo del diablo y El laberinto del Fauno. (Ve aquí un recuento de la filmografía del realizador mexicano).

En esta triada de filmes tenemos como constante inocencias arrebatadas por una realidad violenta, cruel, nauseabunda; por la orfandad, el desamparo y la muerte, aunque paradójicamente resguardadas por un escape fantástico. Todos estos elementos, unidos a las sutilezas y autenticidad de las actuaciones de un elenco protagónico infantil seguramente fueron algunos de los motivos que cautivaron al jurado del Fantastic Fest, donde López obtuvo el reconocimiento de Mejor dirección y al del ScreamFest donde ganó cinco premios, entre ellos el de mejor película.

Inmediatamente la directora nos adentra en el contexto político-social que carcome a Estrella (Paola Lara), una joven estudiante que en un día escolar como cualquiera debe protegerse de las balaceras y los ajustes de cuentas que tienen lugar justo afuera de su recinto educativo. Este lamentablemente mexicanísimo escenario de las provincias acechadas por el narcotráfico es sólo el principio de los males de la protagonista. Cuando Estrella llega a su casa descubre a una madre desaparecida, seguramente secuestrada por el grupo organizado predominante en la zona, que bien podría ser los Zetas, los Caballeros Templarios o, como en este caso, los Huascas.

Con su mamá ausente, la niña gasta uno de los tres simulados deseos que su maestra le da en la escuela y que se encuentran condensados dentro de los gises de un pizarrón. Obviamente quiere que su madre regrese, pero su petición tiene consecuencias funestas, clara alusión al popular refrán que advierte tener cuidado con lo que se anhela. Perseguida por fantasmas (reales e imaginarios y plasmados con unos efectos especiales bastante cuidados para los estándares nacionales), la pequeña protagonista se une a una pandilla de niños igualmente abandonados a su suerte por la crueldad del destino, y es entonces que descubre violencia y dolor inimaginables.

Una de las mayores fortalezas del filme es la pericia actoral y el realismo que los niños (Juan Ramón López, Rodrigo Cortés, Hanssel Casillas y Nery Arredondo sin previa experiencia actoral) imprimen a sus personajes, al hacerlos entrañables, memorables y empáticos; en pocas palabras, son el corazón de una historia descorazonada, un oscuro cuento de hadas sobre la fiereza de sobrevivir.

Estos pequeños diamantes tienen numerosos antagonistas: sicarios despiadados, un país para el que son invisibles, la situación de calle, secuestradores y un Tenoch Huerta en el rol de un “luminoso” político que en realidad es una alimaña terrorífica. Mediante su personaje se puntualiza la crítica social de la película. Probablemente él constituye el aspecto más horroroso del filme que también cuenta con algunos visos de terror. El sincretismo entre lo irreal y una sobrecogedora verdad han probado ser una combinación ganadora en el cine, como lo ha demostrado Guillermo del Toro previamente, y en Vuelven no son la excepción.

autor No soy la Madre de los Dragones, pero sí de @Enlabutaca; desde ahí y en Cine PREMIERE estoy en contacto con las buenas historias. Melómana, seriéfila, cinéfila, profesora universitaria, y amante de las bellas artes. Algún día escribiré una novela de ciencia ficción. ¡Unagui!
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