La última y nos vamos
Un trabajo solvente y con momentos muy divertidos, que va entrelazando historias donde tienen cabida el humor, el drama y la acción.
En una noche de parranda, la máxima siempre es “la última y nos vamos”, pero esto conlleva un contrasentido, pues pareciera que a la última le siguen otras muchas. Y precisamente ése es el punto de partida de la más reciente película de Eva López Sánchez, quien se detiene a contar las vicisitudes un grupo de amigos de clase alta, que deciden salir a celebrar a la Plaza Garibaldi. Ahí, su mundo cambiará y se relacionarán con los personajes más insospechados.
La última y nos vamos es un trabajo solvente y con momentos muy divertidos, que va entrelazando historias donde tienen cabida el humor, el drama y la acción, como una especie de retablo en el que cada uno de los personajes principales sufre una transformación. La cinta intenta rendirle un homenaje a la ciudad de México desde los créditos, donde una vista panorámica y los letreros de sus calles sirven como preámbulo para descubrir otros lugares y otras personas.?
?Tal vez el hallazgo que tiene esta cinta es precisamente el corifeo actoral que logra amalgamar Eva López Sánchez, al recurrir a actores de poca experiencia en el cine, en los personajes principales; pero respaldados con el trabajo de experimentados histriones como Luis Felipe Tovar, Gustavo Sánchez Parra o Jorge Zárate. Y el resultado final es precisamente una película mexicana con un aliento neo yuppie, que intenta ser un llamado al respeto y a la diferencia; y, a partir de la comedia, explicar que la empatía se puede encontrar entre seres totalmente diferentes, no sólo entre iguales…
–Alejandro Cárdenas Ochoa