Pandorum: Terror en el espacio – Crítica

En la Tierra, la humanidad está al borde del colapso: la población llega casi a los 30 mil millones de habitantes y tanto la comida, como el agua son escasas. Tras descubrir un planeta que tiene todas las condiciones para ser habitable, se mandan tripulaciones para llegar a dicho cuerpo espacial. Pero algo sale mal…

Básicamente, la mayoría de las cintas que abordan el terror en el espacio llevan una premisa similar y que recae en un solo resultado: personas atrapadas en una nave espacial, sin tener idea de lo que ocurre ni qué hay afuera -o adentro-. Se me ocurren ejemplos desde la clásica Alien: el octavo pasajero, hasta cintas menospreciadas como Event Horizon. El truco recae en saber desarrollar la trama y mantenernos interesados, y es aquí donde Pandorum: terror en el espacio cumple con ese objetivo.

Debido a que los humanos se someten a un hipersueño que los mantiene así por casi ocho años, al despertar, la memoria no es muy lúcida, por lo que nosotros como audiencia estamos a la par de los protagonsitas. Lentamente vamos descubriendo los secretos que se esconden y las criaturas que parecen habitar la nave.

Obtenemos una que otra dosis de sustos, acción y uno de los mejores gadgets tecnológicos: una rasuradora laser ¡adiós a la barba de ocho años en tan sólo ocho segundos!. Hay diálogos respetables que no ofenden la inteliencia del espectador; aunque llegamos a observar uno que otro cliché en favor de la historia y los personajes, pero que nunca resultan una molestia.

Seguramente la película de Pandorum: Terror en el espacio no sobresaldrá en listas de grandes clásicos, ni los momentos más aterradores o las criaturas más repugntantes en la historia del cine, pero cumple uno de los principales motivos al momento de ver una película: entretener y punto.

Sergio López Aguirre Stanley Kubrick alguna vez dijo "Para tener una visión más amplia, no sólo vean cine bueno, también el malo" obvio le hice caso en lo segundo y es muy divertido.