Operación escape
Una comedia animada ligera y entretenida, que tiene un buen ritmo y gracias a su 3D es más llamativa.
La aventura interplanetaria de la familia Supernova, cuyos miembros son extraterrestres azules sin narices que habitan en el avanzado planeta Baab, es entretenida, o más bien, lo es hasta el momento en el que nos da la sensación de ya haber visto algo así antes… ¿Simpáticos alienígenas encerrados en fortalezas militares, colaborando con el ejército estadounidense? Plantada la pregunta en nuestra mente, es probable que nos perdamos de uno o dos momentos importantes por estar distraídos, tratando de desentrañar el misterio. ¡Ah sí! Lo vimos en el 2009, en Monstruos vs. Aliens.
Una vez establecido que Operación Escape, del director Carl Brunker (diseño de arte en Mi villano favorito), no es la película animada más original, vale la pena rescatar las razones por la cual merece una oportunidad, a pesar de sus guiños a otras animaciones. Por un lado, se trata de un filme completamente familiar, y no sólo por la inocencia del humor y de la historia en sí, sino porque tiene como tema central a la familia. Es una fábula espacial sobre los lazos entre hermanos y entre padres e hijos, perfecta para el público infantil y con varios momentos frescos también para los adultos.
Gary Supernova es un alienígena nerd que trabaja en la estación espacial de Baab, asegurándose desde de su computadora de que su hermano Scorch, héroe intergaláctico, complete sus misiones. Su vida de padre de familia se ve interrumpida cuando Scorch decide viajar al planeta “obscuro”, del cual nadie ha logrado salir, mejor conocido como la Tierra. Ahí empiezan las dificultades, en las que se verán involucrados todos los Supernova, desde el pequeño hijo de Gary, hasta su imparable esposa.
Cabe destacar el trabajo de Diego Luna (Gary), en lo que fue su primera experiencia de doblaje. Sin imitar a su contraparte en inglés, Rob Corddry, su voz ofrece muchos matices que refuerzan la personalidad paternal del extraterrestre genio, al mismo tiempo que permanece reconocible. Por su parte, el actor José María Yazpik (Scorch), quien ya había doblado anteriormente para el filme de El Santo vs. la Tetona Mendoza, también hace un buen trabajo, con un tono muy parecido al de su contraparte, Brendan Fraser.
La película tiene un buen ritmo, mientras que el 3D la hacer más llamativa y cuenta con un par de detalles sobre la cultura popular que resultan muy divertidos (¡ojalá hubiera más!). Con decir que Fidel Castro hace una pequeña aparición en una secuencia que muestra fotografías reales. Sin embargo, muchos de sus personajes alienígenas son olvidables, especialmente aquellos que se encuentran secuestrados en la Tierra.
En suma, se trata de una película que no sorprenderá, pero que cumplirá con entretener a los pequeños por un rato: como un cuento para dormir que enseña una linda moraleja, pero que al otro día ya no emociona mucho.