Resident Evil 2 Apocalipsis – Crítica
Una secuela con mayor acción pero que sacrifica las secuencias de horror, mantiendo un perfil bajo.
Resident Evil 2 Apocalipsis comienza donde nos quedamos en la primera película, Resident Evil El huésped maldito: Alice se encuentra abandonada en Raccon City y pronto tendrá que hacer frente a cientos y cientos de zombies.
Aquí se nos presentan los eventos que llevaron a Raccon City a ser un territorio de nadie debido a la propagación del virus. Y es así como conocemos a personajes rudos y sobrevivientes como Carlos Olivera y Jill Valentine (interpretados por Oded Fehr y Sienna Guillory). Sin embargo ellos necesitarán más que su astucia, para salir de Raccon City, ellos requerirán a Alice, quien ahora forma parte de la experimentación genética de la Corporación Umbrella.
Sin dudarlo Resident Evil 2 Apocalipsis goza de mayor acción que su antecesora, aunque sacrifica el horror. Y a pesar de que conocemos más detalles del universo de Umbrella, del guión lo hace de una manera muy básica, mientras que los nuevos personajes –fuera de Valentine– son más planos que un disco de PlayStation.
Por otro lado, el enemigo principal, Némesis, tiene un maquillaje bien logrado pero lejos de su explosiva introducción, al momento de tener su esperado enfrentamiento con Alice, no es más que un lastre sentimental en busca de su redención. Además, ¿de dónde viene tanto amor de Alice hacia Matt/Némesis (Eric Mabius), si tan sólo convivieron un par de horas en Resident Evil El huésped maldito?
Parece convertirse en una nueva tradición dejar un cliffhanger que asegure una tercera entrega, y al menos este final resulta más prometedor para los fanáticos del videojuego y de Milla Jovovich por igual.
Al final, Resident Evil 2 Apocalipsis es de esas cintas que disfrutas más en compañía de amigos con el mismo gusto por el videojuego, o simplemente para quienes buscan poner su mente en off y así en el momento que comiencen los créditos finales, se olviden por completo de la película. Por el otro lado, los fanáticos del género zombie resultarán decepcionados por tratarse de un producto que busca vender más juguetes, en lugar de intentar convertirse en una película de culto.