Originalmente pirata – Crítica de la película
Divertida comedia de buen corazón que juega con la nostalgia; una idea que podría haber dado mucho más si Gondry, pese a su estatus de culto, aceptara sus limitaciones y se enfocase más en el fondo que en la forma.
Crítica de la película Originalmente pirata, de Michel Gondry (Eterno resplandor de una mente sin recuerdos), con Jack Black.
Aunque tiene una de las ideas más frescas en años, la película Originalmente pirata sufre en la ejecución al estar a manos de Michel Gondry, un director de gran talento e imaginación, que aún no sabe detenerse antes de caer en el exceso: intenta que todo se vea original, pero descuida el aspecto narrativo con demasiadas pelotas en el aire. Cuando su amigo Jerry –magnetizado luego de intentar sabotear una planta eléctrica- borra las películas del videoclub en el que trabaja, Mike decide filmar su propia versión de Los cazafantasmas para una cliente que la exige.
Cámara en mano, nulos recursos y poca idea de la técnica requerida, su obra tiene éxito y pronto la gente del barrio empieza a ordenar los títulos que quieren ver, entre ellos, Una pareja explosiva 2, El rey león o El chofer y la señora Daisy. ¿Logrará el éxito de sus versiones ‘suecas’ salvar la tienda, amenazada por una constructora que quiere derribar el edificio en el que, dicen, nació una gran leyenda del jazz local?
La premisa de ver varias cintas famosas hilarantemente reconstruidas por amateurs -el principal atractivo en los anuncios- resulta frustrante y corta en la versión final, que dedica más tiempo al forzado planteamiento inicial o al ya muy visto conflicto de ‘salvemos el edificio que es el alma del vecindario’ que a la desbordante comedia prometida. Lo más importante de la cinta son sus ideas: el poder del cine como instrumento de cohesión social y comunitaria, su trascendencia en la cultura popular bastándole un par de elementos para evocar imágenes profundamente grabadas en el consciente colectivo, y el creciente poder de los realizadores independientes para alcanzar un público masivo gracias a medios como YouTube.