Lego Ninjago: La película – Crítica
La tercera película de la franquicia de Lego está más enfocada hacia el público infantil perdiendo un poco del humor inteligente que la había caracterizado.
La tercera aventura de la franquicia animada de películas de LEGO llega ahora con Lego Ninjago: La película, basada en la serie de juguetes de la misma línea y que sin lugar a dudas llega a ser la más básica de las tres cintas que se han producido a la fecha. Mientras La gran aventura Lego rompía con algunos esquemas y podía tener diferentes lecturas de una misma historia (la de Emmet y la de su creador), o Lego Batman usaba a su favor la gran cantidad de personajes de DC que tiene Warner Bros en una trama llena de acción y personajes de cómic, Lego Ninjago es una cinta animada sencilla y sin gran ciencia detrás.
Garmadon es el máximo villano y busca conquistar la ciudad de Ninjago, pero sus planes siempre se ven frustrados por la intervención de un grupo de ninjas defensores comandados por Lloyd, el ninja verde quien es en realidad el hijo de Garmadon y sólo quiere que su padre lo acepte.
La ejecución de la historia no presenta mucha frescura y se siente similar a una infinidad de películas sobre el joven que debe demostrarle a la gente que es más capaz de lo que ellos creen. Por momentos existen chispazos de ese humor inteligente visto principalmente en La gran aventura Lego, pero son opacados rápidamente por un camino seguro de comedia infantil. Y no es que sea un aspecto negativo, pero para una franquicia que había presentado aspectos inteligentes e innovadores, definitivamente es un retroceso.
Resulta increíble ver que 13 personas comparten el crédito de la historia y guion, y que al final estemos ante un producto que es por demás sencillo y que para su segundo acto y resolución del conflicto termina en algo más simple que fresco. El doblaje tiene la calidad que la franquicia ha entregado anteriormente, aunque no se percibe demasiada tropicalización como la que existió en Lego Batman. La voz principal corrió a cargo del YouTuber Rafa Polinesio, del canal Los Polinesios –que recientemente alcanzó los 8 millones de suscriptores en la red de Google–. Tomando en cuenta que debía llevar la película sobre sus hombros, él cumple en el papel de Lloyd.
Visualmente la producción presenta colores y escenarios llamativos, cargados de vida y naturaleza, y a la par vuelve a combinar elementos del mundo real con la animación, lo que puede ya convertirse en una constante dentro de las producciones de Lego.
Al final, Lego Ninjago es una opción que los más pequeños disfrutarán, pero para los fans que ha dejado las dos previas películas de las figuras armables, sin duda es un producto inferior que no aportará el ingenio visto en sus cintas anteriores. Como “capítulo” individual del «Lego Cinematic Universe» fue un buen experimento, pero sin duda hace que esperemos con más ganas la secuela de las aventuras de Emmet, Lucy y compañía.