Dragon Ball Z La batalla de los dioses
Aplicando modernas técnicas de animación con mesura, Akira Toriyama regresa espectacularmente a Goku y sus guerreros Z, con un estupendo doblaje mexicano.
No están viendo mal: 4 estrellas. El autor de esta crítica reconoce que comenzó a ver el anime y leer el manga de Dragon Ball años antes de que llegara a México. Pero aun así hay que reconocer que no todo lo que se titula Dragon Ball ha sido garantía de calidad. Algunas OVAs, videojuegos, películas, subtramas de la serie y Dragon Ball GT (con la ausencia de Akira Toriyama) causaron pesadillas a más de un fan. Es decir: esta crítica no es la de un fanboy cegado por el deslumbrante regreso del Kame Hame Ha.
Pero 13 años después, y con el aplaudido regreso de su creador, Akira Toriyama, Dragon Ball Z La batalla de los dioses no sólo marca un hito en la saga que más de una generación ama, sino el posible reinicio de una serie animada o de películas. Damas y caballeros: Dragon Ball está de vuelta, no se trata de un simple reencuentro.
La historia se coloca entre el período posterior a la destrucción del terrible Boo y antes del epílogo del manga, donde Goku llega por la reencarnación buena de aquel villano. Se trata del despertar del llamado dios de la destrucción, quien brinda balance al universo… destruyendo, para que los otros dioses puedan crear después. Obviamente Goku intentará detenerlo, sobre todo por el gozo de encontrar un rival digno de vencer. Astutamente, Toriyama y su equipo escribieron una historia que, aunque no atenta contra los eventos de GT (al fin y al cabo, hubo a quienes sí les gustó), sí está lista para reemplazar dicha saga, siempre y cuando el regreso de Goku y su pandilla sea un éxito. Ya lo fue en Japón, ahora habrá que esperar la reacción en Latinoamérica, aunque el regreso del legendario equipo de actores que doblaron la serie es un gran punto a favor.
Quienes sigan lo último del anime en Japón podrían criticar a La batalla de los dioses por no poseer exceso de combinación CG con animación tradicional o una exagerada cantidad de cuadros de animación. Pero no era necesario. Con elevar los visuales a HD, estilizar personajes y perfeccionar el ritmo de las escenas de acción es más que suficiente.
El doblaje… ¡perfecto!
Sí, hay que poner este aspecto por separado y otorgarle la calificación máxima. De entrada, la interpretación, mezcla e integración de personajes –considerando que ya no se graba en grupo como antes– es impecable.
Tanto Mario Castañeda, René García, Carlos Segundo y el resto de los actores de voz son grandes actores y actrices que 13 años después, demuestran su profesionalismo y gran trayectoria. Lamentablemente se confirma la ausencia de Laura Torres como Goten, aunque por lo menos la voz sustituta (cuyo nombre no aparece en los créditos, posiblemente para no causar polémica) cumple. Eso sí: hay un par de errores de traducción al principio, pero nada que quite el sentido a la trama.
Lo negativo: aunque el balance entre humor, historia y acción es el correcto y la duración del filme supera la de muchos de los anteriores, algunos personajes merecían lucir un poco más. La transformación de Gohan en Super Saiyan después de haber llegado al nivel místico es una extraña contradicción. Fuera de eso, desde novatos hasta los fans más apegados a la saga saldrán complacidos. Aunque quizá no suceda lo mismo al escuchar la versión de “Cha-La Head-Cha-La” de FLOW en idioma inglés. ¡Pero que conste que no es culpa del cantante Ricardo Silva, quien sí realizó el tema en español!
En síntesis: Dragon Ball Z La batalla de los dioses no sólo enloquecerá a fans de la saga, sino que está diseñada para el disfrute de toda la familia. Si jamás has visto Dragon Ball, de todos modos estás obligado a vivir el fenómeno. Lo que logró Diamond Films aquí, al llevar esta pieza de anime a la pantalla grande, no es algo que sucede todos los días, y una buena respuesta en taquilla seguramente permitirá que se repita el fenómeno.
¡Alcen sus manos desde la butaca, y formemos una Genkidama!