Rupert Grint recuerda su paso por Harry Potter: “Se volvió sofocante”
Tras la mágica franquicia, el actor se alejó de las grandes producciones.
Parece que no todo fue mágico en el mundo creado por J.K. Rowling. A casi 12 años del final de la saga Harry Potter en cine, Rupert Grint, el recordado Ron Weasley, viajó al pasado para hablar de sus memorias mientras filmaba la saga fantástica. Y aunque todo parecía ser miel sobre hojuelas, ni siquiera la fama obtenida por ocho películas podía tapar otros problemas inherentes al avance de la franquicia.
En entrevista para Bustle, Grint, que actualmente promueve su nueva película, Llaman a la puerta, habló sobre la parte negativa de filmar tantas películas durante cierta cantidad de tiempo. Si bien, los fanáticos estaban encantados con tener prácticamente una película cada uno o dos años, para los actores se volvió un proceso desgastante.
“Potter me tenía demasiado ocupado. Era filmar todo el año, y luego haríamos la promoción el resto del tiempo. Se volvió sofocante. Quería un respiro, reflexionar sobre todo… Fue una experiencia extracorpórea durante un tiempo, pero creo que terminamos en el momento adecuado. Si continuábamos, todo podría haber ido cuesta abajo”.
Tras formar parte de una de las franquicias más exitosas del séptimo arte, Grint decidió tomarse un tiempo antes de volver al cine. Cuando lo hizo, fue en películas indie o producciones que no se comparaban en lo absoluto con el presupuesto de Harry Potter. También ha participado en series de televisión como Snatch, The ABC Murders, Servant, y El gabinete de curiosidades de Guillermo del Toro. Sin embargo, por muy sofocante que fuera la experiencia, Rupert Grint recuerda con cariño su paso por Harry Potter.
“Sentía una dificultad por ser visto, eclipsado. Pero en las películas, nos fundimos como uno solo. Para el final, me estaba interpretando a mí mismo. Las líneas se desdibujaron. Incluso ahora, si alguien me llama Ron, respondo a ello. Es mi segundo nombre”, agregó.
Otro aspecto que tampoco ayudó al actor fue su salud. Desde 2005, cuando se estrenó El cáliz de fuego, Grint comenzó a sufrir de una intensa amigdalitis. Sin embargo, sus compromisos de promoción de la cinta, y la preparación de la siguiente película ,La Orden del fénix, impidieron que pudiera atenderse y recuperarse de la mejor manera. Su tratamiento no pudo llevarse a cabo hasta 2011, con la franquicia finalizada.
“Mientras estaba filmando, no había forma de que me las sacaran [las amígdalas]. Desde El cáliz hasta el final de la franquicia, simplemente estaba enfermo. Mis amígdalas estaban absolutamente enormes. Se volvieron una metáfora [del trabajo acumulado a lo largo de los años]. Así que, tan pronto como terminé mi trabajo, me las extirparon. Fue una de las mejores decisiones que tomé”, comentó el actor para GQ Magazine.
Al final del día, Rupert Grint no se arrepiente de su paso por la exitosa franquicia. Lo sucedido con Harry Potter es algo que pocas veces se ha visto y repetirá en la historia del cine. Y justamente ese tema, el regreso de la saga, es algo que el actor tiene muy consciente. Además, se muestra contento con la posibilidad.
“Me gustaría que adaptaran Harry Potter para una serie de televisión. Creo que realmente funcionaría. De cualquier forma, estoy seguro de que volverán a hacer las películas”, finalizó.
Llaman a la puerta, su nueva película, donde trabaja bajo la dirección de M. Night Shyamalan, llega a los cines de México este 2 de febrero de 2023. ¿Listos para verlo en una nueva faceta?