Recomendación anime: ¿Por qué deberías ver Kaguya-sama: Love is War?
¿La mejor comedia romántica de la era moderna?
Esta cápsula para el anime Kaguya-sama: Love is War fue elegida por los usuarios de Cine PREMIERE en Patreon.
El amor es un sentimiento sumamente poderoso, capaz de transformar en bufones incluso a individuos excepcionales. Y es que las habilidades requeridas para sortear desafíos de índole intelectual no son transferibles a las relaciones interpersonales. En nuestra juventud, particularmente, esa incapacidad para ser honestos con nuestras emociones, y comprender mejor las de aquellos que nos rodean, transforma a menudo problemas insignificantes en los desafíos más intimidantes. Por ejemplo: confesarle tus sentimientos a otra persona.
Kaguya Shinomiya y Miyuki Shirogane son los máximos representantes del Consejo Estudiantil en la prestigiosa Academia Shuchiin, institución privada que desde el periodo Edo ha sido un recinto para las familias más influyentes y los futuros líderes de Japón. La vicepresidenta Kaguya es una prodigio en cualquier campo en el que fije su atención y la heredera potencial de uno de los cuatro conglomerados empresariales más grandes de la nación. En contraste, Miyuki proviene de un entorno humilde, pero ha trabajado sin descanso para alcanzar la cima académica, convirtiéndose en uno de los pocos estudiantes “impuros” en ejercer como presidente. A los ojos de todos, ellos serían la pareja perfecta y a pesar de que ambos han desarrollado sentimientos entre sí… hay un pequeño problema.
En una subversión a la fórmula tradicional de las historias de romance escolar, donde los protagonistas optan por no realizar un movimiento por el temor al rechazo o de alterar de forma irreparable el status quo de su relación o de su círculo social, en Kaguya-sama: Love is War, este par de genios ególatras, sumamente orgullosos e inseguros, están absolutamente convencidos de que la otra parte está a nada de declararse y sólo necesita un empujón. Rodeados por un ensamble de carismáticos y fascinantes personajes secundarios, estos genios testarudos darán paso a una serie de elaborados planes y juegos psicológicos para convencer al otro de confesar primero sus sentimientos.
El galardonado manga de Aka Akasaka es una lectura fascinante por méritos propios, con sus brillantes diálogos, monólogos e ingeniosos gags visuales, pero aquello que hace especial su transición al anime es la capacidad del director Shinichi Omata y el staff de A-1 Pictures (Your Lie in April) para aprovechar cada elemento del medio, a fin de potenciar el absurdo que tiene lugar dentro de escenarios por demás ordinarios, manteniéndose fieles al material de origen y, al mismo tiempo, lo suficientemente inventivos para continuar empujando las posibilidades infinitas de la animación.
Esto no es sorpresa, pues Omata forjó su estilo como artista de storyboards en estudio Shaft, bajo las órdenes de realizadores vanguardistas como Akiyuki Shinbo & Yukihiro Miyamoto (Puella Magi Madoka Magica), además de dar muestras de su enorme potencial como director en Sankarea: Undying Love y en la magistral Showa Genroku Rakugo Shinju, con un ojo privilegiado para la composición, su distintiva puesta en escena de corte teatral y el dinamismo cinematográfico que imprime a cada secuencia.
En una obra cargada de texto, cada broma, magistralmente cronometrada, es elevada por la constante retroalimentación audiovisual que recibe, desde las expresiones excesivas, los movimientos de cámara grandilocuentes o las imágenes abstractas que acentúan el estado emocional de un personaje; pasando por los juguetones efectos sonoros y el vasto repertorio musical compuesto por Kei Haneoka, listo para ajustarse a los cambios salvajes de tono entre escenas; hasta llegar a las soberbias interpretaciones de todo el reparto. Aoi Koga (Kaguya), Makoto Furukawa (Miyuki), Konomi Kohara (Chika Fujiwara), Ryōta Suzuki (Yū Ishigami), Miyu Tomita (Miko Iino) y, desde luego, el narrador Yutaka Aoyama, están divirtiéndose de sobremanera interpretando estos roles y nosotros no podemos evitar disfrutar de sus personajes tanto como ellos.
Pese a su atractiva premisa, la fórmula de Kaguya-sama: Love is War corría el riesgo de volverse rápidamente repetitiva y terminar desgastada. Afortunadamente, el mangaka Aka Akasaka sabe exactamente cuándo sacudir lo suficiente el relato, ya sea introduciendo nuevos personajes, obstáculos o virando la atención hacia arcos argumentales de corte más serio para brindar un mejor desarrollo a los miembros de su elenco principal. En ese sentido, profesar tu amor a alguien puede resultar aterrador cuando eres joven, pero crecer es un desafío todavía más formidable. A medida que la historia avanza, el humor prevalece, pero los desafíos y los peligros del mundo real se dejan sentir cada vez con mayor fuerza. Apropiado para una historia que retoma elementos puntuales de El cuento del cortador de Bambú del folclore japonés.
Constantemente ingeniosa, entretenida y emocionalmente resonante, Kaguya-sama: Love is War se posiciona como una de las mejores comedias románticas de la era moderna y no dudamos que pueda finalizar su recorrido como una de las mejores en la historia del manga y la animación japonesa.
Kaguya-sama: Love is War está disponible en Crunchyroll y Funimation.