Los amantes de la animación saben perfectamente que la técnica se encuentra en una era dorada, con incontables estudios –Disney, DreamWorks y Aardman , por nombrar algunos– trabajando arduamente en nuevas historias que sigan conquistando al público mientras evolucionan sus respectivas propuestas. Pero pocos saben que la animación va más allá de estos gigantes y que existen incontables esfuerzos aislados que han sido determinantes para el sano desarrollo de la técnica. Estas películas animadas pueden ser poco vistas por millones y millones de personas, pero eso no quiere decir que tienen sus fans y su público fiel que las vuelven a ver una y otra vez.
Lo necesario para que una película conecte con el público no necesariamente tiene que ver con los millones de dólares detrás de ella o con una campaña de mercadotecnia brutal. Simplemente debe tener el corazón necesario para que nos transporte a su mundo animado y de ahí
Para que conozcan un poco más de animación –y si ustedes, como nosotros, son eternos amantes de la técnica– les presentamos nuestra selección con películas animadas poco vistas pero que sin duda alguna merecen mayor popularidad. ¿Quieren compartir más títulos para otros aficionados? Los invitamos a hacerlo en nuestros comentarios.
The Plague Dogs (Dir. Martin Rosen, 1982)
Inspirada en la novela homónima de Richard Adams, The Plague Dogs nos guía por la travesía de Rowf y Snitter, dos perros sujetos a procedimientos experimentales en laboratorios británicos y que aprovechan una mínima distracción de sus captores para escapar de las instalaciones que les aprisionan. ¡Pero no esperen una tierna aventura al estilo Disney! Ambos animales son potenciales portadores de la peste bubónica, por lo que las autoridades deberán comenzar una intensa cacería para evitar una epidemia letal en territorio británico.
¿Por qué verla?
Honestamente no sabemos si los amantes de los animales deberían ver esta emotiva película que captura la eterna lealtad canina, pero cuyas secuencias experimentales siguen generando incomodidad hasta nuestros días. Sin importar lo que decidan, sólo podemos admitir que el director Martin Rosen realizó un estupendo trabajo en la adaptación de una novela sumamente complicada y cuya trama sigue generando división entre las audiencias: algunos anhelan la captura de los perros ante los riesgos que podrían involucrar al mundo, pero otros piensan que una humanidad que provoca tanto sufrimiento animal merece un castigo épico. Véanla y dígannos de qué lado están.
Nueve (Dir. Shane Acker, 2009)
Inspirada en el cortometraje homónimo del propio Shane Acker, Nueve nos adentra en un distorsionado futuro posapocalíptico habitado únicamente por nueve modestos muñecos de trapo. ¿Qué tiene esto de emocionante? Por extraño que parezca, estos diminutos personajes resguardan las claves para salvar a la humanidad de su extinción definitiva. Conmovedora, arriesgada e increíblemente lúgubre por momentos, les garantizamos que cambiará su forma de ver el cine animado.
¿Por qué verla?
El cine animado norteamericano suele enfocarse en los más pequeños y por ello, aplaudimos que Shane Acker llevara la técnica hasta sus límites con una historia arriesgada, conmovedora e increíblemente lúgubre que sobrevivirá por mucho tiempo en la mente del público. A esto agreguemos el apoyo como productores de Tim Burton y Timur Bekmambetov, quienes fueron fundamentales en la realización del proyecto, aunque incapaces de lograr grandes números en taquilla. Sólo nos queda recomendarles que complementen la experiencia con el también célebre corto homónimo que lo inspiró todo.
A Town Called Panic (Dir. Stephanie Aubier & Vincent Pater, 2009)
Se piensa que el stop motion sólo sobrevive con el apoyo de Aardman, Laika y otros grandes estudios. Esto es parcialmente cierto, pero nadie debe olvidar que existen grandes esfuerzos aislados que siguen ejecutando maravillas con la técnica. A Town Called Panic es un buen ejemplo, al explorar las peripecias de tres atolondrados juguetes cuyas buenas intenciones terminan por sumirlos en una peligrosa –pero muy divertida– aventura.
¿Por qué verla?
Sabemos que A Town Called Panic no presume nominaciones al Oscar u otras grandes premiaciones, pero el filme gozó de una estupenda recepción en Cannes, Toronto y además obtuvo una gran respuesta entre la crítica especializada internacional. ¡Incluso hay quienes aseguran que es la mejor película de juguetes de toda la historia! ¿Será? Quizá deberían verla y descubrirlo por ustedes mismos…
The Adventures of Mark Twain (Dir. Will Vinton, 1985)
Se dice que el primer universo combinado llegó con el estreno de ¿Quién engañó a Roger Rabbit?, otros se inclinan por la publicación de The League of Extraordinary Gentlemen y algunos más lo atribuyen al estreno de Iron Man. Nosotros nos vamos por la poco conocida The Adventures of Mark Twain, que fusionó algunos de los personajes más entrañables del genio literario en una divertidísima aventura protagonizada por el propio escritor norteamericano. ¡Todo ello con la magia del stop-motion y bajo la dirección del ganador del Oscar Will Vinton!
¿Por qué verla?
The Adventures of Mark Twain sólo puede describirse como el mejor homenaje imaginable al reconocido autor: la historia es protagonizada por Mark Twain y sus inolvidables Tom Sawyer, Huckleberry Finn y Becky Thatcher. El cuarteto viaja en persecución del Cometa Halley que fascinó al escritor durante toda su vida; finalmente el proyecto incluye incontables referencias a la obra escrita del norteamericano. ¿En serio hay que decir más?
The Last Unicorn (Dir. Arthur Rankin Jr. & Jules Bass, 1982)
La casa de animación Rankin/Bass Productions siempre será recordada por su espectacular trabajo en Rudolph the Red-Nosed Reindeer –sí, la de stop-motion que veíamos cada Navidad– y pocos saben que el estudio también trabajó en incontables proyectos fantásticos de animación tradicional. ¡Incluso realizó una poco conocida adaptación de El Hobbit! Sólo The Last Unicorn logró mantenerse vigente entre algunos sectores del público, con una emotiva historia inspirada en la novela de Peter S. Beagle que nos guía por el emotivo viaje del último unicornio para garantizar la supervivencia de su especie.
¿Por qué verla?
Los unicornios figuran entre las criaturas fantásticas más queridas por las audiencias, pero muy raras veces aparecen como protagonistas de grandes aventuras cinematográficas, ¿será porque su belleza, perfección y fragilidad resulta excesiva en un mundo saturado de peligros? No lo sabemos y sólo podemos asumir que esta singularidad ha sido fundamental para que The Last Unicorn goce de tanto amor entre los contados miembros del público que la han visto. Mención aparte para la tragedia personal de nuestra protagonista, quien es convertida en humano para proteger su identidad y sólo termina sufriendo más ante los dolores que aquejan a nuestra especie: los engaños, las decepciones y el siempre tortuoso amor.
Fritz the Cat (Dir. Ralph Bakshi, 1972)
Inspirado en las tiras cómicas homónimas, Fritz the Cat explora la vida de un gato neoyorquino de los años 60. Lejos de ofrecer una perspectiva idealizada, el personaje presenta una clara sátira de los ideales estudiantiles de la época centrados en el amor libre y los eternos movimientos políticos.
¿Por qué verla?
¿Realmente creen que la animación es sólo para niños? Quizá deberían echarle un vistazo a Fritz the Cat, cuya controvertida historia logró convertirla en la primera animación con clasificación X en la historia del cine norteamericano. Es fácil pensar que esta evaluación truncó sus aspiraciones taquilleras, pero lo cierto es que sólo aumentó la curiosidad del público hasta consolidarla como un impresionante éxito económico que recaudó más de $90 MDD a nivel mundial. ¡Hasta tuvo una secuela titulada The Nine Lives of Fritz the Cat! Actualmente luce como una película muy modesta en su técnica, pero la importancia de su historia suele ubicarla entre las grandes joyas animadas de todos los tiempos.
Time Masters (Dir. René Laloux, 1982)
Todos conocimos Fantastic Planet de René Laloux, pero pocos saben que el creativo también ejecutó otra de las grandes joyas de la animación francesa: Time Masters. Inspirada en la novela L’Orphelin de Perdide de Stefan Wul, la trama nos transporta al planeta desértico Perdide, habitado por gigantescas avispas alienígenas y donde el pequeño Piel espera un milagroso rescate tras ser el único sobreviviente del accidentado vuelo que transportaba a su familia.
¿Por qué verla?
¿Vieron Fantastic Planet? De ser así, entonces no requieren más explicaciones para ver esta joya olvidada de René Laloux, todo un maestro de la animación francesa y quien aprovechó su enorme talento en sólo tres largometrajes animados que –apoyados en el sci-fi– exploraron de manera magistral los diferentes rostros del ser humano.
Persepolis (Dir. Vincent Paronnaud & Marjane Satrapi, 2007)
¿Una animación tradicional realizada en blanco y negro en pleno 2007? No dejen que estas características les desanimen, pues muchos aseguran que Persepolis se ubica entre las máximas joyas animadas de los últimos tiempos. Después de todo, sólo un proyecto así lograría aprovechar la modestia de su propia técnica y falta momentánea de color para explorar la tragedia iraní durante la Revolución Islámica. Por cierto, si quieren complementar la experiencia, les recomendamos leer los comics de la propia Marjane Satrapi y que sirvieron como inspiración al proyecto.
¿Por qué verla?
La temporada de premios siempre viene acompañada de una enorme polémica: algunas películas ganan por sus méritos técnicos y otras por su popularidad entre las audiencias. Sin embargo Persepolis figura entre las pocas producciones que también logró el reconocimiento especializado por su impacto social, participando así en certámenes tan diversos que van desde el Alliance of Women Film Journalists, Women Film Critics Circle y Cannes hasta los Annie, Golden Globes y el mismísimo Oscar. ¿Pero qué tiene Persepolis que resulta tan fascinante para todos? Quizá deberían verla y descubrirlo.
Song of the Sea (Dir. Tomm Moore, 2014)
Ubicada entre las grandes joyas animadas de los últimos tiempos, Song of the Sea explora la tragedia de dos hermanos obligados a abandonar su hogar cuando la pequeña Saoirse –motivada por la magia que siempre rodeó a su familia– se coloca una piel de foca que revela su verdadera naturaleza. En un esfuerzo desesperado por evitar una partida definitiva, el valeroso Ben deberá acompañarla a través de numerosos peligros que le guiarán por el mundo mágico de la mitología celta.
¿Por qué verla?
Nadie sabía que Irlanda era capaz de producir animación de alta calidad hasta que Cartoon Saloon estrenó la aclamadísima The Secret of Kells en el 2009. Tras unos años de sequía –¿o deberíamos decir aprendizaje?– el estudio regresó a lo más alto con Song of the Sea, que de nueva cuenta compitió por la máxima gloria hollywoodense, pero finalmente sucumbió ante los eternos gigantes de la animación norteamericana. ¿Y qué hay del público? Algunos amantes de la técnica tradicional le dieron una oportunidad e inmediatamente fueron conquistados por su magia, pero el proyecto se mantiene como una joya oculta para la gran mayoría de las audiencias.
La tumba de las luciérnagas (Dir. Isao Takahata, 1988)
La destreza de Hayao Miyazaki es tan impresionante que muchos suelen olvidar la importante labor de Isao Takahata para el desarrollo de Ghibli: co-fundador, genio creativo y gran responsable de la cinta más desgarradora del estudio. La tumba de las luciérnagas nos guía por la tragedia de los hermanos Seita y Setsuko, quienes deberán luchar diariamente para sobrevivir durante los últimos meses de la II Guerra Mundial.
¿Por qué verla?
Nos encanta la magia que Totoro, Chihiro, Ponyo y Mononoke han aportado a Ghibli, pero ninguno de estos fantásticos personajes es capaz de igualar el impacto provocado por los pequeños Seita y Setsuko en La tumba de las luciérnagas. Después de todo, ¿qué puede ser más tortuoso que ver a dos inocentes niños luchando por sobrevivir durante el mayor conflicto bélico de toda la historia? Si no la conocen, les recomendamos verla inmediatamente. Quizá no se atrevan a repetir la hazaña por muchos años más, pero les garantizamos que el recuerdo de esta película vivirá por siempre en sus memorias cinéfilas.
Luis Miguel Cruz Algún día me uniré a los X-Men, la Alianza Rebelde o la Guardia de la Noche. Orgulloso integrante de Cine PREMIERE desde el 2008.