Woody Allen ha dejado su paso en la historia de la cinematografía mundial de todos los tiempos, con sus 50 años de trayectoria. Su trabajo incluye más de 45 películas, 4 premios Óscar y la creación de un muy peculiar estilo que explora la tragedia humana a través de la comedia.
Una de las características dentro de sus primeras películas, era que Woody Allen aparecía en sus historias en una forma de «autorepresentarse», sin embargo conforme fueron pasando los años tuvo que encontrar a diversos actores para que lo «interpretasen».
A continuación les presentamos algunas de las mejores películas de Woody Allen en su carrera.
Zelig (1983)
Zelig suele ser considerado el filme más inteligente en la vasta trayectoria de Woody Allen, al explorar de manera magistral la necesidad de inclusión que caracteriza al ser humano y que suele orillarle a renunciar a sus propios ideales por el simple deseo de aceptación. Para ello, el realizador nos guía por un falso documental sobre Leonard Zelig (Woody Allen), un hombre que suele cambiar su apariencia física para encajar con las personas que le rodean y quien ha ganado fama mundial tras ser reconocido con el mote del “camaleón humano”. ¿Conocen a alguien similar?
La sabiduría Allen
¿Quieren descifrar el secreto de la vida? El siempre brillante Woody Allen lo develó en Zelig, pero sus palabras nos hacen pensar que se trata de un concepto sobrevalorado: «Tengo 12 años. Corro en una sinagoga. Le pregunto al rabino el significado de la vida…pero me contesta en hebreo. No entiendo nada de hebreo. Luego quiere cobrarme $600 USD por clases de hebreo».
El dormilón (1973)
Aunque Woody Allen suele combinar comedia, drama y romance en la gran mayoría de sus obras, el realizador también se dio un tiempo para explorar la ciencia ficción con El dormilón. El filme provocó sensación al parodiar algunas de las grandes obras del sci-fi, con un vendedor (Woody Allen) erróneamente colocado en criogenia por 200 años, hasta que un grupo revolucionario decide descongelarlo para convertirlo en pieza clave de su levantamiento.
La sabiduría Allen
El cineasta siempre ha sido un duro crítico de la religión, pero ni siquiera esto puede evitar algunas pruebas de fe. O al menos eso nos hizo pensar su Miles Monroe: «Soy lo que llamarías un ateo teológico existencial. Creo que existe una inteligencia en el universo, a excepción de algunas partes de Nueva York».
La rosa púrpura del Cairo (1985)
Los más recientes aficionados de Woody Allen suelen pensar que Medianoche en París fue el primer experimento fantástico en la filmografía del neoyorquino, pero lo cierto es que el realizador ya nos había deleitado con un romance de ensueño en La rosa púrpura del Cairo. El emotivo filme nos presenta a Cecilia (Mia Farrow), una solitaria mesera durante la Gran Depresión y quien aprovecha sus tardes libres para ver de su película favorita una y otra vez. Esta afición llama la atención del mismísimo Tom Baxter (Jeff Daniels), personaje estelar del filme en cuestión y quien decide quebrar la cuarta pared para iniciar una singular relación con la joven.
La sabiduría Allen
Como buenos amantes del celuloide, sabemos que muchos de ustedes han llegado a enamorarse de incontables personajes de la pantalla grande. ¿Cómo justificar estos sentimientos? El realizador neoyorquino lo explica a través de Cecilia: «He conocido un hombre maravilloso. Es ficticio, pero no se puede todo». ¿Alguna vez han sentido una frustración similar?
Medianoche en París (2011)
Muchos pensaban que los mejores años de Woody Allen habían quedado atrás, pero el cineasta los silenció a todos con su célebre Medianoche en París. El realizador se olvida completamente de las calles neoyorquinas para adentrarnos en los hermosos escenarios franceses que servirán de inspiración para un nostálgico guionista (Owen Wilson) dispuesto a todo para escribir su primera novela. ¿No les parece suficiente motivación? Entonces agreguemos algunos viajes en el tiempo para interactuar con algunas de las grandes mentes creativas de inicio del siglo XX.
La sabiduría Allen
¿Alguna vez se han preguntado cuáles son las motivaciones de los grandes artistas? Suponemos que cada creativo ofrecerá respuestas completamente diferentes, pero asumimos que los comentarios de Gertrude Stein en Media noche en París coinciden mucho con los ideales del mismísimo Woody Allen: «Todos tememos a la muerte y cuestionamos nuestro sitio en el universo. La labor del artista es no sucumbir ante la desesperación, sino encontrar un antídoto para el vacío de la existencia».
Manhattan (1979)
Las calles de Nueva York siempre han atestiguado algunos de los principales romances de la historia cinematográfica, siendo Manhattan uno de las más memorables. Isaac Davis (Woody Allen) es un hombre maduro, con doble divorcio y quien vive una relación amorosa con una joven de apenas 17 años, pero todo esto cambiará al enamorarse de la siempre interesante amante (Diane Keaton) de su mejor amigo. ¿Cuáles serán los resultados de este hilarante enredo? Sólo un genio como Woody Allen podría darnos la respuesta adecuada.
La sabiduría Allen
¿Cómo fue que Woody Allen convirtió Nueva York en su eterna musa inspiradora? El cineasta nos ofrece la respuesta en las primeras líneas de Manhattan: «Capítulo uno. Era tan rudo y romántico como la ciudad que amaba. Detrás de sus cristales oscurecidos estaba el enroscado poder sexual de un gato de la jungla. Oh, me encanta esto. Nueva York era su ciudad y siempre lo sería».
No podríamos estar más de acuerdo…
Maridos y esposas (1992)
Para muchos, la cinta más personal de Woody Allen, al explorar las siempre complejas relaciones amorosas con dos parejas al borde del colapso: Jack (Sydney Pollack) y Sally (Judy Davis) han decidido separarse para iniciar una nueva vida, mientras que Gabe (Woody Allen) y Judy (Mia Farrow) prefieren aferrarse sólo para extender su dolor. Como ingrediente adicional, Maridos y esposas representa la última colaboración entre Woody Allen y su entonces pareja Mia Farrow, quienes terminaron su relación al poco tiempo por la infidelidad del cineasta. Quizá por ello, los últimos instantes del filme se sientan plagados de una inusual tristeza en la filmografía del neoyorquino.
La sabiduría Allen
Existen incontables científicos, creativos y artistas que han intentado descifrar los secretos para una relación exitosa. Lamentablemente Woody Allen no comparte este optimismo, o al menos eso pensamos con los comentarios de su Gabe Roth: «Verán, tengo esta idea sobre lo que llamo una mujer kamikaze. Las llamo kamikazes porque, ya saben, estrellan sus aviones, son auto-destructivas. Pero los estrellan contra ti y tú mueres junto con ellas». ¿Será la frase más tormentosa en la obra del neoyorquino?
Hannah y sus hermanas (1986)
El neoyorquino es un especialista en la exploración de relaciones tormentosas, pero también ha demostrado su maestría en familias conflictivas como Hannah y sus hermanas. La cinta se desarrolla en un transcurso de dos años, tiempo suficiente para que una tercia de hermanas sufra toda clase de emociones provocadas por decepciones sentimentales, engaños familiares y el regreso de viejos amores. Quizá no sea la película más popular de Woody Allen, pero se trata de una verdadera joya que absolutamente nadie debe perderse.
La sabiduría Allen
Aunque muchos lo consideran un maestro de la comedia, hay quienes desprecian el trabajo de Woody Allen al considerarlo excesivamente deprimente. Aunque admitimos que muchos de sus personajes viven al borde de la tragedia, el cineasta demuestra con Hannah y sus hermanas que el peor dolor siempre puede venir acompañado de una sonrisa: «Hace una semana compré un rifle. Iba a, ya saben, me dijeron que tenía un tumor e iba a matarme. Lo único que me detuvo fue que mis padres estarían devastados. Tendría que matarlos también. También tengo una tía y un tío, ya saben, habría sido un baño de sangre».
Crímenes y pecados (1989)
A pesar de ser uno de los peores fracasos taquilleros para Woody Allen, Crímenes y pecados se mantiene como una de las grandes consentidas entre la crítica internacional. La cinta explora dos historias paralelas sobre personajes completamente diferentes, quienes terminan encontrándose en un evento común para confesar sus respectivas fallas y los efectos que éstas tendrían en una producción cinematográfica.
La sabiduría Allen
¿Se sienten desesperados y necesitan un buen consejo sobre qué esperar de la vida? Woody Allen comparte una buena dosis de sabiduría a través del personaje de Clifford Stern, al recomendar que «nunca escuchen lo que dicen sus maestros. No les presten atención. Sólo fíjense en su aspecto y así entenderán cómo será la vida en realidad».
Jazmín azul (2013)
Woody Allen siempre ha demostrado un enorme talento en la creación de grandes personajes femeninos. ¡Ahora imaginen los resultados de combinar esta maestría con la impresionante calidad histriónica de Cate Blanchett! Las respuestas pueden apreciarse en Jazmín azul: la trágica historia de una mujer que decide buscar el apoyo de su modesta hermana para sobrellevar una dura crisis personal, para luego quebrar cualquier lazo familiar con su increíblemente compleja –y muy superficial– personalidad.
La sabiduría Allen
¿Será Jasmine Francis el personaje más tormentoso en la filmografía de Woody Allen? No lo dudamos, especialmente cuando ella expone los eternos dolores en la sociedad contemporánea: «Ansiedad, pesadillas y un colapso nervioso. Hay sólo una cantidad de traumas que una persona puede soportar antes de salir a la calle y empezar a gritar».
Annie Hall (1977)
¿Es Annie Hall la mejor película de Woody Allen? La respuesta ha generado opiniones encontradas desde hace varios años, pero definitivamente podemos ubicarla como la cinta más popular en la vasta filmografía del neoyorquino. El filme gira alrededor del comediante Alvy Singer –un exquisito Woody–, quien dedica gran parte de su tiempo a cuestionar el desenlace de su relación con Annie Hall (Diane Keaton). A partir de entonces, el proyecto nos guía por un complejo noviazgo que inicia de forma prometedora, para luego quebrarse ante las tensiones de la formalidad. ¿Cuántos no han sufrido una historia similar?
La sabiduría Allen
¿Qué opina Woody Allen de las relaciones amorosas? Aunque la respuesta puede apreciarse en la gran mayoría de sus películas, el director engloba la idea perfectamente en la más memorable cita de su filmografía: «Pensé en una vieja broma, ya saben sobre este tipo que va al psiquiatra y le dice ‘Doc, creo que mi hermano está loco; piensa que es un pollo’. Y el doctor responde ‘Bueno, ¿por qué no lo traes?’ y el tipo dice ‘Lo haría, pero necesito los huevos’. Bueno, creo que eso es exactamente como me siento sobre las relaciones; ya saben son completamente irracionales, dementes y absurdas, pero creo que seguimos porque, bueno, la mayoría de nosotros necesitamos los huevos».
Luis Miguel Cruz Algún día me uniré a los X-Men, la Alianza Rebelde o la Guardia de la Noche. Orgulloso integrante de Cine PREMIERE desde el 2008.