Ya te extraño
Una tragicomedia cuya buena manufactura y sencillez en el tratamiento salva los excesos.
Partir de una postura de reafirmación de género para validar los aciertos de una propuesta fílmica, podría resultar bastante ineficiente a la hora de hacer un análisis. Sin embargo me permitiré hacerlo en esta ocasión, para referirme a los comentarios que se han vertido sobre Ya te extraño –coproducción entre Estados Unidos y Reino Unido, proyectada en el Festival Internacional de Cine de Toronto–, catalogándola como una película «hecha por mujeres, sobre mujeres y para las mujeres». Y es que si algo demostró en su momento la directora texana Catherine Hardwicke –sobre todo con su primer trabajo, A los trece–, fue una enorme capacidad para explorar y exponer temas alrededor de las mujeres, sin caer en visiones excluyentes y con la fórmula necesaria para interesar y convencer al público en general, como en este caso. El guión, obra de Morwenna Banks, quien retoma conceptos de su programa de radio, Goodbye –producción de la BBC, que a su vez se basa en sus propias experiencias–, sigue los pasos de Milly y Jess (papeles para los que al inicio estuvieron consideradas Rachel Weisz y Jennifer Aniston) encarnadas por Toni Collette y Drew Barrymore, respectivamente. La primera vive en Londres, tiene dos hijos y le han diagnosticado cáncer de mama. La segunda esta casada y en proceso de formar una familia, pues acaba de quedar embarazada. Ellas son mejores amigas desde su juventud y juntas enfrentarán a tan terrible enfermedad, reinterpretando su forma de ver la vida, sus planes y su relación misma.
Sin duda se trata de una premisa con los ingredientes necesarios como para que hubiera desembocado en un producto sensiblero, manipulador o sumamente cursi. Afortunadamente, la también directora de Crepúsculo –una referencia que igual no habla muy bien de ella, así que mejor tratemos de ignorarla–, decide recorrer los caminos de la comedia sutil, con un manejo ligero y orgánico de la cámara, que potencia la intimidad de las acciones y, sobre todo, la química de la afortunada asociación de las actrices protagonistas. Así, tenemos a una contenida Collete y una Barrymore más cómoda que nunca, y ambas respiran naturalidad y encanto en cada escena. Hay que mencionarlo, es el buen provecho que se saca de ellas y del resto del elenco, incluidos Dominic Cooper, Paddy Considine, Jacqueline Bisset y Tyson Ritter, el principal acierto de Ya te extraño, que sin llegar a profundizar lo suficiente –porque ciertamente se queda un tanto corta en su discurso–, se plantea como una tragicomedia divertida, reflexiva y sobre todo honesta.
La buena manufactura y la sencillez del tratamiento, hacen pues que se trate de una producción que sin negar lo convencional de su formato, vaya más allá de ser “hecha por mujeres, sobre las mujeres y para las mujeres”, lo primero es innegable, pero por lo demás, se trata de una propuesta sobre sentimientos y para todo aquel que quiera dejarse conmover, pasarla bien y de paso reflexionar un poco.