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Cine

Respira

04-07-2015, 12:51:20 PM Por:
Respira

Respire, es un retrato de una amistad adolescente con el que vale la pena quedarse hasta el final.

Cine PREMIERE: 4
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El segundo largometraje como directora de Mélanie Laurent (Bastardos sin gloria) es una historia íntima y pequeña, pero de grandes alcances introspectivos, actorales y narrativos sobre la adolescencia, la amistad, los secretos y las consecuencias. 

Basada en la novela del mismo nombre de la autora Anne-Sophie Brasme (escrita cuando tenía apenas 17 años), Respira, la película, sigue la historia de Charlie, una jovencita (una estupenda Joséphine Japy) que comienza una relación de amistad con la chica nueva del colegio, Sarah (Lou de Laâge). Atinadamente, la cinta se aleja de la estructura de la novela (no lean nada sobre el libro para no arruinarse la sorpresa) y nos oculta su desconcertante clímax para abrirle paso al retrato de una amistad que cualquiera que haya pasado tiempo en una prepa reconocerá: la joven promedio se hace amiga de la «chica cool» y queda prendida de ella inmediatamente. La referencia al arquetipo descrito por Amy Dunne el año pasado en Perdida no es coincidencia. «Amazing Amy» estaría orgullosa. 

Con una destreza y paciencia que envidiarían cineastas más experimentados, Laurent se toma su tiempo y no desespera en colocar, una por una, las piezas de este rompecabezas de una relación en decadencia. El camino hacia el clímax es lento, pero preciso. Su cámara es íntima y logra retratar (con poca necesidad de diálogos de exposición) la situación familiar de ambas chicas y las fallas que ambas reclaman en sus hogares, pero que no logran discernir en su propio comportamiento. Es cierto que todos tenemos tres personalidades: a solas, con nuestro círculo cercano y con el resto del mundo. Especialmente frente al implacable ecosistema preparatoriano. 

Sea en Francia (donde está situado este filme) o en cualquier parte del mundo, las desgarradoras y explosivas relaciones adolescentes son las mismas y Laurent sabe retratarlas con empatía y humanidad. La advertencia obligada es que el 95% de la cinta tiene un ritmo muy pausado y quizá demasiado lento, pero hay que quedarse con ella. Hay que confiar en la cinta y en el ojo de Mélanie Laurent, sin duda una cineasta con un brillante futuro tras la cámara. 

autor Escritor, director de cine y director editorial en ésta, su amigable vecina publicación de cine, Cine PREMIERE. Nunca perderá la esperanza de una segunda temporada de Studio 60 on the Sunset Strip y Firefly.
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