Adam Driver abandona entrevista por clip de Marriage Story
No puede verse ni en pintura.
Al parecer, el californiano es de aquellos histriones que prefieren no ver (ni siquiera escuchar) su actuación en determinada serie o película. A pesar de la incomodidad que podía generarle a Adam Driver la emisión de una escena de Marriage Story (donde él figuraba), igualmente ésta fue emitida durante una entrevista. ¿Y qué ocurrió? Que el actor abandonó aquella conversación sin brindar explicaciones.
Acorde a Daily Beast, Adam Driver fue invitado a una entrevista (a distancia) en el programa radiofónico Fresh Air, de Estados Unidos. Antes de concluir su intervención, el intérprete se retiró abruptamente «tras expresar disgusto por la idea de escuchar un clip de sí mismo cantando ‘Being Alive‘». El clip referido pertenece a Historia de un matrimonio, largometraje estrenado en Netflix a principios de diciembre y por el cual Driver aspira a un SAG Award.
Cabe aclarar que las pláticas en aquel talk show (vía The Washington Post) rara vez tienen lugar con entrevistador y entrevistado en la misma habitación. Regularmente Terry Gross (conductora del programa) hace las preguntas desde un estudio en Filadelfia, mientras que los entrevistados responden desde otras partes del país.
En palabras de Danny Miller, productor ejecutivo de Fresh Air:
«Nos sorprende que esto se haya convertido en un gran problema. Siempre reproducimos clips cuando invitamos a actores. Ése es el procedimiento estándar para cualquier entrevista de radio o podcast. Sabiendo que a Adam Driver no le gustaba escuchar clips de sí mismo, lo invitamos a que se quitara los auriculares mientras se reproducía el clip de Marriage Story»
Aparentemente, los representantes del histrión no han respondido a las solicitudes de una declaración en torno al suceso.
Un perfil reciente del actor, generado por New Yorker, rememora que la aversión de Driver a verse o escucharse ha quedado comprobada desde que no entró a la proyección de El infiltrado del KKKlan en Cannes 2018. También asevera que el intérprete de Kylo Ren se quedó congelado al ver su actuación durante la premiere de Star Wars: El despertar de la Fuerza (2015).